Los diferentes productos industriales que se comercializan tienen que cumplir con estándares de calidad, como los que marcan las normas API; las empresas que cuentan con estas exigencias, son más confiables porque detrás de sus equipos existen evaluaciones que garantizan su eficiente desempeño.
¿Qué son las normas API?
El American Petroleum Institute (API) es una organización estadounidense que “representa todos los segmentos de la industria del gas natural y el petróleo”, según lo explican en su sitio web oficial.
La organización se fundó en 1919 y desde entonces, además de procesar y distribuir energía en todo Estados Unidos, han desarrollado más de 700 estándares que mejoran la seguridad operativa, ambiental y de sostenibilidad de diversos productos, por ejemplo, los tanques de almacenamiento.
Aunque API comenzó a promover la seguridad en la industria a nivel nacional, en los últimos años su trabajo se ha expandido hasta tener un alcance internacional, lo cual les permite liderar el desarrollo de estándares operativos que mejoran las prácticas de compañías alrededor del mundo.
“API mantiene más de 700 estándares y prácticas recomendadas, abarcan desde la protección ambiental, prácticas de operación e ingeniería, hasta equipos y materiales seguros. Nuestras normas API son las más citadas por la comunidad reguladora internacional”, añade la organización.
¿Para qué son las normas API?
Las normas API son reconocidas internacionalmente por su rigor técnico y su acreditación de terceros, es decir, que tiene la aceptación por parte de reguladores estatales y federales en muchos países del mundo.
Con estas normas, las compañías pueden fabricar productos de mayor calidad y brindar servicios más eficientes. Además, se garantiza la equidad en el mercado para las empresas y se promueve la aceptación de las buenas prácticas en las industrias, principalmente las que trabajan con el petróleo y sus derivados.
“Los estándares API mejoran la seguridad de las operaciones de la industria, garantizan la calidad, ayudan a mantener bajos los costos, reducen el desperdicio y minimizan la confusión. Llevan los productos al mercado más rápidamente y ayudan a acelerar la aceptación”, puntualiza la organización.
El conjunto de estándares que maneja API se enfoca en diversas áreas de la industria del petróleo y el gas. Por medio de sus normas se promueven especificaciones como el mantenimiento de los pozos y las estructuras de perforación.
Estas normas API también proporcionan orientación y recomendaciones para el diseño de sistemas industriales en instalaciones petroquímicas o en terminales de gas natural. De igual manera, con los estándares se puede mejorar la aplicación y fabricación de productos.
Tanques bajo normas API
Los tanques de almacenamiento son estructuras industriales de un tamaño generalmente grande, en ellos se conservan productos indispensables para las empresas, por ejemplo, petróleo y sus derivados, e incluso, materia prima de grado alimenticio.
Por su utilidad, los tanques deben de tener una calidad sobresaliente para que no contaminen las sustancias almacenadas y se mantengan intactos a pesar de que muchas veces se instalan en zonas abiertas, por lo que están en contacto con la lluvia y el viento.
Una forma de verificar la calidad de los tanques es por medio de las normas API, si cuentan con alguno de sus estándares, se garantiza que el tanque es seguro para almacenar temporalmente las sustancias para las cuales fueron diseñados.
Dentro de los numerosos estándares API, el 650 es el que hace referencia a los tanques para almacenamiento de petróleo, ahí se detallan los lineamientos para garantizar “la seguridad, sostenibilidad y el desempeño ambiental de los tanques, a fin de mantener la excelencia operativa entre los fabricantes”.
Esta norma se aplica a todos los tanques que almacenen fluidos a una presión atmosférica menor a 18 kPa (kilopascal), o a presiones internas que no superen el peso del techo y no rebasen una temperatura de 93°C.
La norma API 650 abarca el diseño y el cálculo de los elementos que deben constituir el tanque, incluso se sugieren secuencias de instalación y recomendaciones de soldadura dependiendo de los materiales con los cuales se fabrican.
En el caso de la norma API 620, esta hace referencia al diseño y construcción de los tanques que tienen grandes dimensiones, fabricados principalmente de acero, operados a presiones medias e instalados sobre la superficie. Dicho estándar admite rangos de presiones internas de 18 a 103 kPa.
Por otra parte, el estándar API 2350 se enfoca en la prevención de sobrellenado para tanques de almacenamiento en instalaciones petroleras, su objetivo es que los operadores implementen un sistema integral que evite el sobrellenado y los productos se transfieran de manera segura a estas estructuras.
También es conveniente mencionar a la norma API 12D, la cual establece las condiciones de diseño, fabricación e instalación de tanques cilíndricos verticales, muy utilizados en industrias como la petrolera y la alimenticia.
Existen tanques fabricados con fibra de vidrio que son ideales para preservar alimentos, productos químicos y petroquímicos. Si cuentan con alguna de estas normas, representan una acertada inversión para las empresas, ya que las API garantizan su calidad y durabilidad, por lo que podrán utilizarse de manera segura.
